Sábado 20.4.2024
18.7.2018. Como se sabe, la gobernadora bonaerense María Eugenia Vidal decidió echar a María Fernanda Inza de la Contaduría General de la Provincia. La ahora ex funcionaria está complicada por su participación como Tesorera de la campaña electoral que realizó Cambiemos en 2017, principalmente en lo relacionado a la poca transparencia que se observan en los aportes de afiliados y adherentes a sus candidatos.
En la mini conferencia de prensa que dio este miércoles en Casa de Gobierno para anunciar mejoras en planes sociales, Vidal adelantó –previo al anuncio del pedido de renuncia a Inza- que había ordenado una auditoría sobre la rendición de fondos del Frente Cambiemos que se presentó a la Justicia.
“Frente a esto doy la cara como lo hecho siempre en cada dificultad de la vida, de la gestión”, dijo Vidal, para luego agregar que “mi conducta ha estado basada toda mi vida en la honestidad”.
Lo cierto es que Inza ya no es más la Contadora General de la Provincia, pero todavía sigue siendo la Tesorera del Pro, partido que a nivel bonaerense es presidido por Vidal desde agosto de 2016. Cabe entonces la pregunta: ¿No debería haber echado, primero, a la dirigente partidaria y después a la funcionaria?
