Viernes 19.4.2024
10.12.2018. El caso es por demás insólito. O vergonzante. Lo cierto es que apenas asumió su cargo de juez administrativo de Infracciones de Tránsito Provincial en el Departamento de San Isidro, Hernán Alejo Fernández Suñer, ingresó al sistema informático en donde se concentran las multas de tránsito del territorio bonaerense y lo primero que hizo fue dictar una resolución en donde él mismo se absuelve de una falta cometida.
Pero esta demostración de abuso de poder de Fernández Suñer, según se supo en los últimos días, vino precedida de serias anormalidades en la tramitación del concurso que se abrió en la Provincia para cubrir el cargo que ocupa desde el 2 de noviembre de 2018.
El flamante juez de tránsito cumplió 50 años el 12 de noviembre último, el límite de la edad que exige la Ley 10430 para el ingreso de personal en la administración pública bonaerense. Es decir, diez días después de acceder al cargo, lo que demuestra el apuro administrativo que hubo en los días previos para avanzar con su designación.
El ministro de Gobierno bonaerense, Joaquín de la Torre, desestimó una a una las impugnaciones que se realizaron ante la falta de transparencia en la designación (según trascendió, una presentación está en estudio de la Justicia en lo contencioso administrativo de La Plata), situación que motivó sospechas de manejos turbios.
“De La Torre forzó el dictamen de selección para justificar la llegada al cargo del flamante juez de faltas, basando su fundamento en los cargos, experiencia y trayectoria fantasma”, expresó una fuente calificada del ministerio de Gobierno que siguió de cerca el trámite de designación.
Quien tampoco estuvo ajeno a la llegada de Fernández Suñer al juzgado de faltas fue el subsecretario de Gestión Gubernamental, Iván Budassi, dado que lo notificaron de las irregularidades cometidas en el procedimiento administrativo pero se limitó a guardar silencio.
Además, en tal sentido, fue llamativo el rol del Director Provincial de Política de Seguridad Vial, Víctor Stephens, quien avaló todo el proceso de designación al justificarse con la excusa de que “así es la política”.
Recibido con el título de abogado en la Universidad de Buenos Aires (UBA) hace apenas 8 años (tenía entonces 42 años de edad), Fernández Suñer acreditó una amplia trayectoria en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, dado que trabajó en la Legislatura, en el Gobierno de la Ciudad y en el ministerio de Transporte de la Nación (este fue el último lugar de desempeño documentado). Ninguno de esos empleos tuvo que ver con el cargo para el que concursó y ganó, además de estar en una jurisdicción distinta.
En el currículum vitae (CV) que presentó para el concurso para la cobertura de juez de faltas, Fernández Suñer pudo acreditar muy pocos: abogado, profesor, participación en cursos, un empleo en el Registro Nacional de Precursores Químicos y empleado en relación de dependencia (por 4 meses) en una empresa de venta de accesorios de caza y pesca. Como se observa, nada vinculado a cuestiones de seguridad vial.
Lo que llamó la atención de quienes elaboraron los pliegos para el concurso fue que, en la planilla que deben completar los aspirantes al cargo, fue el hecho de que Fernández Suñer no escribió nada en el ítem “estado civil”, situación que levantó sospechas referidas a que “alguien” le pudo haber realizado el trámite en cuestión.
Otro aspecto tiene que ver con que es Monotributista Categoría "A", con fecha de inicio de actividades Septiembre de 2018, es decir, con una antigüedad de 25 días a la apertura del concurso.
El 21 de diciembre de 2017, el ahora juez de tránsito de San Isidro circulaba con su vehículo Toyota Etios por una ruta de la ciudad bonaerense de Las Flores. Por lo que se pudo constatar en el acta de infracción, circulaba a una velocidad de 109 Km/h, cuando la máxima permitida era de 60 Km/h.
Por ese hecho, la penalización que le llegó a su domicilio de CABA fue de 1.929,25 pesos.
Su acceso al cargo de juez a menos de un año de cometer esa infracción le vino de parabienes para “autoexculparse”. En realidad, Fernández Suñer no paga nada en provincia de Buenos Aires: ni monotributo, ni Ingresos Brutos, ni la Caja de Abogados… ni una multa de 1.925,25 pesos que bien podría hacer frente con su flamante sueldo -alrededor de 70.000 pesos- como funcionario bonaerense.
