Tras el papelón del juez de faltas de San Isidro, la Provincia llama a un nuevo concurso
Casa de Gobierno bonaerense.

Tras el papelón del juez de faltas de San Isidro, la Provincia llama a un nuevo concurso

8.1.2019. El insólito caso del apenas asumido juez administrativo de Infracciones de Tránsito Provincial en el Departamento de San Isidro, Hernán Alejo Fernández Suñer, quien ingresó al sistema informático en donde se concentran las multas de tránsito del territorio bonaerense y lo primero que hizo fue dictar una resolución en donde él mismo se absolvió una infracción cometida, derivó en su renuncia en diciembre último.

Lo que fue considerado un abuso de poder por parte de Fernández Suñer, llegó precedido de serias anormalidades en la tramitación del concurso que en su momento abrió el Gobierno bonaerense, el cual ganó y se lo designó para empezar a prestar funciones el 2 de noviembre de 2018.

Ahora, la Provincia de Buenos Aires abrió un nuevo concurso de antecedentes (lo cual genera nuevas pérdidas de tiempos y costos) para ocupar el cargo que finalmente dejó vacante Fernández Suñer tras su alejamiento. En definitiva, si bien decidió renunciar, en ámbitos gubernamentales señalan que esa decisión fue solicitada expresamente por el director provincial de Política de Seguridad Vial, el contador Víctor Stephens.

Desde su renuncia a la fecha, y por encontrarse el juzgado sanisidrense en estado de descontrol por el desborde de causas de tránsito que allí se tramitan, el Gobierno bonaerense decidió que sea Mario Quattrocchi el juez subrogante.

Cabe señalar que, desde el 12 de diciembre, Quattrocchi tiene la misión de continuar con el normal desenvolvimiento del despacho y firma del Juzgado Administrativo de Infracciones de Tránsito del Departamento de San Isidro.

El mencionado juez subrogante se encuentra a cargo del Juzgado Administrativo de Infracciones de Tránsito Provincial del Departamento de La Plata, cargo para el cual concursó de manera simultánea con Fernández Suñer, quien en ese momento lo hacía por el de San Isidro.

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