Martes 23.4.2024
21.11.2019. En lo que se considera un verdadero hito para la salud pública, se realizó por primera vez en un hospital de la provincia de Buenos Aires una intervención denominada “nefrectomía laparoscópica transvaginal”, que consiste en la extracción de un riñón por vía vaginal.
Según lo explicado por especialistas, este procedimiento “evita cicatrices, disminuye el dolor y permite una recuperación más rápida de los donantes”.
La operación se realizó hace alrededor de un mes en el hospital San Martín de La Plata, específicamente en la Unidad de Trasplante Renal del CRAI Sur del Cucaiba dependiente del ministerio de Salud bonaerense.
Dicha cirugía estuvo a cargo de Francisco Osella, quien estuvo acompañado por el equipo de profesionales del establecimiento ubicado en Avenida 1 y 70 de la capital provincial.
Los profesionales señalaron que “tanto la donante como su receptor respondieron con una evolución favorable y fueron dados de alta”.
Cabe señalar que en las nefrectomías con donante vivo, la técnica tradicional es la cirugía abierta mediante lumbotomía (incisión en la zona de la espalda), lo que genera muchas veces dolores postoperatorios persistentes, eventraciones o infecciones debido al corte.
“El ingreso de técnicas menos invasivas en la práctica habitual permite reducir esa morbilidad, conserva la seguridad del paciente, produce menor sangrado y se obtienen mejores resultados estéticos”, explicaron.
Al respecto, el jefe de la Unidad de Trasplante Renal, Fabián Taylor, manifestó que “si bien esta fue la primera intervención realizada por vía transvaginal, las extracciones renales en el hospital San Martín de La Plata se vienen efectuando por vía laparoscópica desde el año 2002”.
En ese sentido, Taylor sostuvo que la vía laparoscópica “acorta las molestias y el tiempo de internación se reduce aproximadamente de 10 a tan sólo 2 días de aquellas personas sanas que por solidaridad donan un riñón para algún familiar que lo necesita”.
La cirugía endoscópica a través de orificios naturales (NOTES) y la laparoendoscopía a través de sitio único (LESS) son técnicas de reciente desarrollo que combinan los principios de la endoscopía y la laparoscopía para remplazar la cirugía tradicional minimizando el uso de incisiones abdominales.
Los especialistas destacaron que la extracción de un riñón por vía transvaginal supone un nuevo hito quirúrgico importante. Así, en casos de donante vivo, la laparoscopía arroja una menor morbilidad en el donante respecto de la cirugía a cielo abierto, disminuye el dolor, la necesidad de analgésicos y permite una más rápida recuperación.
“Los profesionales del Cucaiba trabajan para superarse, apuntando a una mayor efectividad en los trasplantes realizados y a una mejor recuperación en los casos de donante vivo”, destacaron las autoridades del organismo.
A su vez, reconocieron el compromiso de los integrantes de esa misma Unidad de Trasplante que, en los últimos días, también realizó el primer trasplante simultáneo con donante cadavérico.
Este último procedimiento se resolvió por tener los dos riñones de un mismo donante asignados a receptores del CRAI Sur y, en lugar de realizar las cirugías consecutivamente, se trabajó en simultáneo con dos equipos quirúrgicos que hicieron posible que el tiempo de isquemia (detención o disminución de la circulación de sangre) de los órganos a implantar fuera el mínimo necesario, lo que mejora las posibilidades de funcionamiento del injerto.
