Jueves 25.4.2024
13.1.2022. Prácticamente no hay ámbito institucional nacional, provincial o municipal que quede sin cubrir en un aspecto de la política argentina: el vínculo familiar que luego se transforma en la ocupación de cargos en los gobiernos nacionales y provinciales y administraciones más cercanas a la ciudadanía, como las intendencias y concejos deliberantes. Aunque, vale aclararlo, en el ámbito sindical también se dan las mismas situaciones.
Muchas líneas se han escrito respecto al poder que tuvo en su momento María Eva Duarte de Perón, Evita, esposa del entonces presidente de la Nación, Juan Domingo Perón. En su condición de tal, supo forjar un vínculo indestructible con la ciudadanía, con su pueblo, bien lejos de ser una mujer destinada al rol decorativo.
Exilio mediante tras el golpe militar contra su gobierno, Perón vuelve al país en la década del ’70 para llegar nuevamente a la presidencia con una fórmula de sello propio: Perón-Perón. Quien lo secundaba era María Estela Martínez, más conocida como “Isabel”.
Matrimonios con poder pleno, sí los hubo. Y esos son dos ejemplos irrefutables.
Más acá en el tiempo, mucho podría decirse del matrimonio conformado por Néstor Kirchner y Cristina Fernández. Él, presidente y luego, ella presidenta por dos períodos consecutivos.
Y en una de las provincias, hay un ejemplo emblemático: Santiago del Estero. Allí, con la idea de terminar con el “caudillismo” del entonces gobernador Carlos Juárez (a cargo del distrito por más de 20 años); en 2005 el Gobierno nacional decidió intervenirlo tras una serie de graves incidentes producto de movilizaciones populares.
Desde ese año y hasta la fecha, un matrimonio se reparte la alternancia en ese gobierno santiagueño: Gerardo Zamora y su esposa, Claudia Abdala. Mientras tanto, también, alternan sus bancas en el Senado nacional. Cosas del poder.
En tantas otras provincias argentinas son moneda común las repeticiones de apellidos por vínculos familiares: los Colombi en Corrientes, los Menem en La Rioja o los Rodríguez Saá en San Luis.
Ya en lo que se refiere al territorio bonaerense, y luego de ser ministro en los gobiernos de Perón y de Isabel, Antonio Cafiero se convirtió en gobernador de la provincia de Buenos Aires. Familia prolífica si las hay en la función pública, la ramificación llega hasta el presente: su nieto, Santiago Cafiero, es el ministro de Relaciones Exteriores. Y el primo hermano de este, Francisco Cafiero, se desempeña en el ministerio de Defensa.
Antes, Juan Pablo Cafiero, el padre de Santiago, fue ministro de Seguridad y de Desarrollo Social bonaerense y luego embajador en la Santa Sede. Su hermano Mario Cafiero falleció hace poco tiempo, mientras estaba a cargo del Instituto Nacional de Asociativismo y Economía Social (INAES).
En lo que respecta a los municipios y precisamente en los movimientos y corrimientos que se produjeron en 2021 en el marco de estrategias electorales, la cuestión familiar pasó a ser trascendental a la hora de tomar decisiones vinculadas al despojo de las funciones públicas. Obviamente, nadie volvió al llano, sino que fueron simples movimientos para escalar posiciones.
Un ejemplo de esto puede ser el adoptado por el intendente de Castelli, Francisco Echarren: pasó a ser Director Nacional de Desarrollo de Obras del ministerio de Transporte de Nación, pero antes dejó en la intendencia a su hermano, Sebastián Echarren.
Jorge Ferraresi, intendente de Avellaneda, pasó al ministerio de Desarrollo Social y Hábitat y dejó el municipio bien custodiado por su esposa Magdalena Sierra, quien es la Jefa de Gabinete.
Gustavo Menéndez, flamante presidente del Grupo Bapro, pidió licencia y dejó la intendencia de Merlo en manos de su hermana, Karina Menéndez.
En San Isidro, ya mostró presencia en las últimas elecciones y fue elegida concejala Macarena Posse; hija del actual intendente Gustavo Posse y nieta de otro histórico dirigente radical y distrital quien también fue intendente, Melchor Posse.
San Fernando, distrito comandado por el joven intendente Juan Andreotti desde 2019, impulsó por el Frente de Todos la candidatura de su hermana Eva Andreotti, quien finalmente triunfó en las elecciones del 14 de noviembre de 2021. El padre de ambos, Luis Andreotti, fue intendente durante los períodos 2011-2015 y 2015-2019.
En Campana, en representación de Juntos, la lista ganadora para el Concejo Deliberante la encabezó Elisa Abella, hermana del intendente Sebastián Abella.
Por la Primera Sección Electoral, en 2021 se renovaron bancas para el Senado. Una de las candidatas, quien finalmente revalidó, fue Daniela Reich, esposa del intendente de Tres de Febrero, Diego Valenzuela.
En Tigre, la que encabezó la lista para el Concejo Deliberante por el Frente de Todos fue Gisela Hortazo, esposa del intendente Julio Zamora, y por eso le gusta llamarse Gisela Zamora. Como se sabe, el matrimonio ilustre del distrito es el conformado por el presidente de la Cámara de Diputados de la Nación, Sergio Massa; y Malena Galmarini, presidenta de Aguas y Saneamientos Sociedad Anónima (AySA).
San Miguel, en donde el actual senador bonaerense Joaquín De la Torre supo ser intendente y padrino político del actual jefe comunal, Jaime Méndez, tiene a su hermano Pablo De la Torre como secretario de Salud. En tanto, el primo del intendente, Cristian Méndez, encabezó la lista de concejales de Juntos y accedió a su banca.
En San Pedro, se dio un caso del estilo que se viene desarrollando: el intendente Cecilio Salazar pasó a ser director del tren Belgrano Cargas. Antes se aseguró la herencia: dejó a su hijo, Ramón Salazar, al frente del municipio.
Ezeiza es el típico caso en el que se puede decir que una familia funciona como si fuera dueña del distrito: los Granados. Intendente desde la creación del Partido en 1995, Alejandro Granados supo conservar el poder y ahora lo trasladó a uno de sus hijos, el concejal Gastón Granados, quien lo reemplaza en ocasión de pedidos de licencia. La esposa del mandamás, Isabel Beatriz Visconti (quien prefiere llamarse Dulce Granados) fue diputada bonaerense 1993-1997/ 1997-2001/ y diputada nacional desde 2005 hasta diciembre de 2017. Desde fines de 2017 es la presidenta del Concejo Deliberante de Ezeiza.
En el ámbito gremial también hubo discusiones respecto a la postulación de familiares, que estuvieron protagonizadas, nada menos, por dos pesos pesados: el camionero Hugo Moyano y uno de los jefes de la CGT, Héctor Daer. Ganó este último con la candidatura de su hija, Maia Daer, como candidata a Legisladora Porteña, cargo al que finalmente accedió formalmente en diciembre último. Moyano había propuesto a su hija Karina Moyano. Su otro hijo, Facundo Moyano, fue diputado nacional y otro más, Pablo Moyano, le asegura continuidad del apellido en el gremio.
En el Partido de La Costa, el apellido De Jesús está bien arraigado: Juan De Jesús supo ser intendente durante cuatro períodos consecutivos y luego diputado provincial. Su hijo Juan Pablo De Jesús lo sucedió en 2007 y continuó allí hasta diciembre de 2019 (tres períodos seguidos). Tras un breve paso por la Jefatura de Gabinete, volvió a la Legislatura, en donde tiene mandato hasta diciembre de 2023.
Berazategui, territorio que se rebautizó a partir de un apellido arraigado en la política: “Mussimundo”. Juan José Mussi fue intendente por primera vez en 1987 y volvió al municipio (es su quinto mandato) para reemplazar a su hijo Patricio Mussi, quien ejerció el cargo durante dos períodos consecutivos desde diciembre de 2011 a diciembre de 2019.
En la Cámara de Diputados bonaerense hay más casos de familiares: durante el período 2015-2019 ocupó una banca como diputado el marplatense Javier Faroni, del Frente Renovador. Actualmente es director de Aerolíneas Argentinas y tiene siete producciones teatrales en Mar del Plata, Carlos Paz y CABA, el trabajo que le hizo ganar trascendencia pública.
Desde 2019, en Diputados, lo reemplaza con una banca su hermana Marcela Faroni.
Y los matrimonios políticos, además de los mencionados, siguen siendo muchos: el ministro de Seguridad bonaerense Sergio Berni y la diputada nacional Agustina Propato; el presidente de la Cámara de Diputados bonaerense, Federico Otermín y la ministra de Ambiente provincial, Daniela Vilar; la diputada nacional Mónica Macha y el ex intendente de Morón y presidente de la Autoridad de la Cuenca Matanza Riachuelo (ACUMAR), Martín Sabbatella.
Los Macha-Sabbatella son un caso especial en dicha ciudad: el hermano de Martín, Hernán Sabbatella; es Jefe de Asesores del municipio. La hija del matrimonio, Camila Sabbatella; es la Vicejefa de Gabinete municipal.
Cabe destacar que, cuando se produjeron los pases de intendentes a los Gobiernos nacional y provincial, todos se aseguraron una cuestión fundamental en los casos donde no había continuidad o herencia familiar: quienes quedaron a cargo son simples soldados que cumplen órdenes. De lo contrario, nadie iba a pegar el salto.
Por ese motivo, el Jefe de Gabinete nacional, el tucumano Juan Manzur, dudó mucho en aceptar el convite del presidente Alberto Fernández. Antes de su desembarco, arregló muy bien las cuentas con su vice, Osvaldo Jaldo, de quien desconfiaba seriamente.
Lo peor de todo es que muchas personas de la política se enojan cuando alguien que llega a competirles desde afuera las cataloga como “casta”.
