El centro de La Plata y las únicas ratas que se erradican: las que están pintadas
La rata pintada en 6 y 48.

El centro de La Plata y las únicas ratas que se erradican: las que están pintadas

17.9.2019. Las veredas del centro de la capital bonaerense, especialmente cuando cae la tarde y comienzan a oscurecerse, se convierten en un depósito de basura de todo tipo. Hay contenedores distribuidos en todas las cuadras del microcentro, pero parece que eso no les importa a quienes optan por dejarlas en el piso.

Cuando prácticamente no queda nadie en las calles y las bolsas de residuos siguen posando sobre las veredas, llega el turno de las ratas que pululan por el centro de la ciudad. Es asombroso observarlas por calle 50 entre 7 y 8, una zona en donde antes relucían restaurantes. Lo mismo sucede en 47 entre 7 y 8; en donde las bolsas de los negocios pertenecientes a cadenas de hamburguesas terminan siendo el objetivo principal de los roedores.

El centro de La Plata y las únicas ratas que se erradican: las que están pintadas
Ya no está. No fue magia...

Otro agravante: la vereda de la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad Nacional de La Plata, 6 entre 47 y 48, se ha convertido en el centro de las ceremonias festivas de quienes allí estudian y se reciben. De modo que los más variados alimentos, bebidas y otros productos de enchastre pasan a conformar un cóctel explosivo de olores, colores y suciedad, la cual es prolijamente barrida con fuertes chorros de agua por parte del personal universitario.

No son pocos los transeúntes que, a altas horas de la noche, se han topado con el paso de las ratas que se hacen un festín con los desechos producto de tantos festejos.

Tal vez para graficar lo que sucede en esa cuadra, en la esquina de 6 y 48, un artista ocasional decidió pintar una rata que simulaba comer lo que algunos festejantes habían dejado desparramado en el piso. Por lo que se ve, a alguien molestó la ocurrencia y mandó a cubrir ese trabajo.

Lo que importó fue tapar la rata de mentira. Con las de verdad, nadie se mete.

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